martes, 6 de noviembre de 2012

Quien anda allí?

Volví del cafetín, eran las 02:20 de la madrugada. Algo curioso me pasó en el transcurso de la oficina hacia el cafetín.
Sentiste alguna vez la sensación de estar siendo observado? De sentir que tienen a alguien respirándote en la nuca sabiendo que estas solo y que esa rara sensación hace que te se erice la piel? Eso mismo me pasó. No le di mucha importancia (Claro, si no darle importancia, es igual a acelerar el paso jajaja).
Al entrar al cafetín, encendí la luz y mientras me preparaba una taza de anís y té (no puedo tomar café, mi higadito no quiere) nuevamente esa sensación. Estaba endulzando el agua cuando me pareció ver a alguien parado en la venta mirándome, por inercia levante la cara (reconozco que me auste) para ver que era y me asuste cuando me vi reflejado!.
Sergio, eres un huevon, te asustas de todo, bueno, si, estas medio feon, pero ya deberías estar acostumbrado a verte, no es para tanto, pensé.
Volví a dirigir la mirada hacia mi vaso y mientras esperaba que el anís filtre lo suficiente como para meter el sobrecito de te, mire nuevamente hacia la ventana. Esta vez quería atravesar con la mirada mi reflejo en el vidrio de la ventana y ver el mar. No alcanzaba a ver mucho por que afuera, la noche estaba algo oscura, fue cuando vi que detrás de mi reflejo en la ventana, algo con la misma forma del reflejo se deslizaba hacia un costado y luego cayó al suelo, como si cayera una sabana casi transparente. Y en lo que demore preguntándome que había sido eso, ya estaba en la puerta con mi vaso y caminando rapidito hacia la oficina. Jajajaja No se bien que fue lo que vi, pero es la segunda vez que me pasa.
Cuando llegamos a vivir a Santa Catalina en Barranca, encontramos ya bien grande al buen “Negro”, negrito para los cuates (así se llamaba un perrote, cruce de una Pastor alemán con su papá N/N), la casa era grande y estaba ubicada dentro de un terreno mucho mas grande que el estadio de barranca. Era una casa hacienda muy bonita ubicada en una esquina de todo el terrenote. Esta casa tenia veredas al rededor, pasando la casa habían cuartos vacíos que alguna vez fueron almacenes, mas al fondo había un corral donde alguna vez criaron gallos de pelea, era grandísimo, muchas separaciones, entradas, salidas; frente a la casa, al otro extremo habían talleres vacíos, pasando los talleres habían lavaderos de carros y una loza deportiva. Bueno, el caso es que al cabo de un tiempo nos enteramos que en uno de esos cuartos vacíos que habían pasando la casa, había fallecido uno de los socios de lo que fuera una empresa de transporte de carga. Que Negro, era su mascotita.
El perrote se hizo nuestro amigo al toque, era fiel, noble y aunque daba miedo, el miedoso era el. Dormía en la vereda a la altura de la ventana de mi cuarto y todas las noches se levantaba y daba una vuelta completa a la casa. No sabíamos por que, pero era como si hiciera su ronda cuidando, era nuestro vigilante de cuatro patitas. Si prestabas atención, lo podías escuchar cuando rondaba por que sus uñitas sonaban con el cemento de la vereda. Una noche, mis papás y mi hermana salieron a cenar y como yo tenia tarea por hacer me quede a terminarla. Recuerdo que estaba en mi cuarto, haciendo mi tarea en el escritorio, en ese momento le daba la espalda a la ventana. Frente a mi, había un espejo grande que enfocaba a la ventana que estaba detrás de mí y la ventana a uno de los estacionamientos. La casa estaba muy silenciosa, sin nadie en la casa, estaba solo y afuera a la altura de mi ventana como siempre estaba el fiel, mi perrito (por que lo adoptamos, asi que ya era mío). En eso al negrito se le ocurre levantarse y hacer su ronda. Lo sentí por el sonido de sus uñas. Escuche que se alejaba de la ventana, llegó a la sala, pasó por la puerta de la sala, lo volví a escuchar pasando por el baño que estaba con la ventana abierta, perdí el sonido y volvió a aparecer de regreso hacia la ventana. En eso levante la mirada y por el espejo, conforme pasaba mi perro, la sombra de un hombre alto pasaba lentamente con el.
Como comprenderán, me quede congelado. No quería moverme para nada. En un par de eternos minutos, Negro dio una vuelta más a la casa y se echo a la altura de mi ventana. No quise levantar la mirada nuevamente. Solo quería que vuelvan mis viejos rápido. Cuando vi que el portón se abrió, y vi los faros de la camioneta entrando al parqueo (eran mis viejos yeeeee) el alma me volvió al cuerpo. Igual no me moví hasta que entraron a la casa jajajaja.
Como??? Que no hay que tenerle miedo a los muertitos sino a los vivos??? Que los muertitos no hacen nada??? Como dice mi Veinteañera;;; Si Cuñao!!! Jajajaja
Igual me falta poco para salir de descanso, le dejaré a mi relevo algo con que entretenerse ;)

7 comentarios:

  1. Wow!! Q buena!!
    Aunque cuando lei y hablabas de q alguien te respiraba en la nuca me dije nooooo!!! Jajajajaja

    muy buena entrada!!! Me gusta asustarme.
    Pobre negrito. Lo bueno es q su anterior dueño se acordaba de sacarlo a pasear.

    Yo tengo muchaa de fantasmas!! Ya te contare!!

    Ooooe x q no escribes mas seguido?

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    1. Pensabas que me partirían el cuello??? jajajaja
      Si, pero ese ex dueño que aburrido para hacerlo pasear por toda la vereda, debería sacarlo a correr, yo sacaba a mi perra "Paola" a correr a la playa jeje
      Cuenta ps, quiero miedo!!!

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  2. Jajajaja, pues si!!! Se supone que no da miedo, pero no es de todos los días toparte con un muerto, o sea!!! Yo me hago la pichi te juro. En donde yo trabajaba, el cole, pasaban esas cosas, yo me quedaba hasta tarde y sentía eso, que me miraban desde la ventana. Otras personas me contaban que sentían lo mismo, luego me pasaron un par de cositas que me quitaron las ganas de volverme a quedar hasta tarde.

    Estoy solita en mi casita, con todo oscuro porque todo está cerradito, hay lluvia y truenos, excelente el ambiente para leer tu entrada, me encantó!

    Besos Churrito!!!!

    Ah! De acuerdo con la queja de Gary! No te pierdas pues! u.u

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    1. Te doy toda la razón minita, no es de todos los días, pero no te me estés haciendo la pichi por aquí y por allá pues!!! jajajaja. Si en la universidad, esas aulas grandes, en el cole, las aulas antiguas como que daban miedito. tengo mas de estas historias, aun que no he visto mucho muertito.
      Con respecto a la queja de Gx, lo que pasa mi estimadísima Veinteañera, es que entre las empresas y los 6 hijos no me abastezco (jajajaja). Ya, está bien escribiré un poquitito mas seguido. Gracias por seguirme!

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    2. Casi lo olvido; Besote y abrazote para mi Veinteañera!

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  3. Bueno. La próxima vez, le hablas y le dices: "No te preocupes: lo cuidaremos muy bien. Puedes ir en paz al otro lado de la vida".

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    1. jajajaja me hiciste reír Renzo. Bien malo eres no? con las justas miro de reojo tratando de fugar cuando estoy asustado y tu todavía me pides que les hable??? (Aquí es cuando cito las palabras celebres de la veinteañera) Si cuñao!!! jajajaja. trataré, loprometo!
      Abrazo!

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