Confesión Desenterrada

Desde que te vi, supe que eras la mujer que mi corazón y mi vida necesitaba, supe que podría hacerte muy feliz si así tú lo hubieses querido, pero no todo en la vida es perfecto como un putin cuento de hadas.

Cuando te vi, terminaba el colegio y me preparaba para otros estudios, nunca te lo dije, pero el color verde y el celeste te hacían parecer una muñeca de porcelana. Tu sonrisa iluminaba todo el salón de clases y tenia el poder de hacer de mis huesos gelatina.

Antes de que pueda confesar cuanto me gustabas, te vi con alguien. Hay cosas que uno nunca olvida, y pues vi algo que forma parte de esas cosas que no olvido. Era de mañana, un pantalón de tela delgada, un polo de hilo pegado, una bincha verde sobre tu frente tiraba tu cabello hacia atrás. Estabas allí besándote con el, agarrada de su cuello y el pasaba sus manos por la parte baja de tu cintura (las cuatro letras ps). Debo confesar que esa imagen dio vueltas por varios días en mi mente y aun así no podía asimilarlo. Tiempo después me enteré por ti que ya no estabas con el y en vez de alegrarme, me dio pena por ti y cólera con el, “pero que imbecil, que puede tener en la cabeza ese taradazo…, como va a cambiarte por una flaca que nada que ver” – pensé por dentro. Sip! el Ojiverde la cambió. Cuando te confesé el amor que sentía por ti, dijiste que me querías mucho y que querías mi amistad (típico no?). Hasta me bautizaste como tu muñequito por los siglos de los siglos (tengo mi título ojo jajaja).

Ahora que lo pienso, no te culpo. Yo era un remedo de rastafari jajaja osea un patín que vestía ropa suelta, siempre con pitas y cojudeces en el cuello y muñeca, con anillos en casi todos los dedos de la mano (del pie no por que si no, no me calzaban la zapatillas), con el cabello largo (ahhh como extraño mi cabello weee weee weeee) y con la sonrisa no favorecida.

El tiempo pasó, nos alejamos, nos dejamos de ver, pero eso si, desde que te conocí hasta la fecha, todos los 24 de Mayo, encontré la manera de saludarte aunque sea por teléfono en el día de tu cumpleaños. Muñequita Feliz cumple, y me conformaba con escuchar: Muñeeeequiiiito gracias por acordarte de mi!!! (Nunca olvidare esa fecha, cuatro días antes de mi cumple). Luego me contaste que tenias una hijita (que después conocí y hasta tío me dijo), que eras madre soltera, que seguías trabajando y hasta estudiando.

Te volví a ver tres veces después de varios años, estas más bonita que antes. Más madura, más interesante. Y tu hijita, tan bonita como tu.

Ahora quiero plasmar lo que nunca te dije: Que en la PRE, chotie a Susan, a Wendy y a Yuliana por que te esperaba solo a ti; Que siempre (hasta hace poco) pensé que si en algún momento yo estaría a punto de casarme con otra, ya en la puerta de la iglesia y toda la cosa, solo bastaría que llegues y me digas vámonos y yo te habría seguido hasta el fin del mundo.

Que cuando nos vimos nuevamente, tenia ganas de decirte que aun me gustas mucho, tanto como antes, pero que el miedo a la misma respuesta me cerró el pico. Que habría vivido mis días a tu lado solo para hacerte sentir una reina, que seria feliz cuidando de ti y de tu hija. Dicen que lo que no es para ti, ni aunque vuelva a nacer y seguro que es eso, que no estamos en la misma frecuencia. ***

En fin el tiempo ya pasó, cada uno tiene su vida hecha, no dejo de admirarte por que a pesar de ser madre soltera, te das tiempo para tus maestrías, tu trabajo, tus padres y tu hija. Y todo lo haces bien.

Encontré estas líneas en un USB que tenía guardado hace algun tiempo, así que era hora de sacarlas a la luz jajaja. La situación ha cambiado, los sentimientos han bajado y por alguna extraña razón nos volvimos un par de extraños. Siempre quedara el cariño, no lo olvides.